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La Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy) lamenta lo ocurrido el pasado 18 de agosto de 2022, en la localidad de Curuguaty, zona de Marina Kue, donde dos personas murieron en el contexto de una larga lucha por la tierra, mientras el Estado continúa estando ausente para la población campesina de ese lugar.

Aunque ya han pasado diez años, el Estado no se ha ocupado de la recuperación de tierras malhabidas ni ha investigado exhaustivamente la muerte de los campesinos durante la masacre ocurrida en junio de 2012, esa inacción estatal se ha cobrado dos vidas más.

La situación en  Curuguaty debe ser entendida no sólo desde lo acontecido en junio de 2012, con la masacre de campesinos y policías, sino también en el marco de las tierras malhabidas y de la disputa por el control territorial en zonas de fronteras por parte de grupos vinculados al crimen organizado . 

Desde la Codehupy, red que trabaja en el monitoreo y defensa de los derechos humanos en nuestro país, llamamos al Estado paraguayo a trabajar por la regularización de las tierras en cuestión. 

Esta regularización en cuanto a la tenencia formal, debe además estar acompañada de la implementación de políticas públicas que impulsen el desarrollo integral de la comunidad. 

Solamente con la implementación de un fuerte sistema de protección social con un abordaje integral y, que tenga como centro la dignidad humana, garantizando todos los derechos humanos de todas las personas que allí habitan, evitarán sucesos como el que ocurrió la semana pasada. 

Sobre este acontecimiento instamos a que se desarrolle una investigación exhaustiva, imparcial, que brinde todas las garantías procesales previstas en nuestro sistema penal, para determinar o deslindar las responsabilidades.

Desde la Codehupy, hacemos un llamado al diálogo pacifico entre todas las partes y  nos solidarizamos con las familias de las víctimas como también con toda la comunidad que se ha sostenido a lo largo de estos años sin acompañamiento estatal. 

Reiteramos nuevamente, en este caso y cualquier otro, que la violencia, en ninguna de sus formas, nunca será el camino para la resolución de diferencias y, mucho menos, para la construcción del diálogo social y político que necesitamos en el país en un marco de democracia.

Asunción, agosto 26 de 2022

Coordinación de Turno: Fundación Vencer, Gestión Local, Grupo Sunu de Acción Intercultural

Secretaría Ejecutiva: Dante Leguizamón Morra