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José Bobadilla lleva décadas de lucha social campesina, marcada por un episodio trágico en su niñez: la desaparición de su padre, integrante de las Ligas Agrarias Cristianas, durante la represión de la dictadura stronista en 1976. En aquel episodio su madre fue detenida y encarcelada por un año.

Su familia se vio obligada a migrar del departamento de Paraguarí a Alto Paraná y, en medio de adversidades, José logró recibirse como docente, ya que sería una forma de motivar a las nuevas generaciones de su entorno, para buscar un mejor porvenir.

Siguiendo los pasos de sus padres, desde joven militó en el Movimiento Campesino Paraguayo (MCP) para luchar con más fuerza por la recuperación de las tierras malhabidas tras la caída del gobierno de Alfredo Stroessner en 1989. Así también, en la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (MCNOC), José se caracterizó por exigir con vehemencia al Estado, mayor atención al sector campesino ante la falta de acceso a la tierra, asistencia técnica y crediticia.

Como uno de sus logros está la creación del Centro Nacional de Formación Integral Campesina (CENFIC) “Juan de Dios Salinas” en 2006, que nació en el seno del MCP. José es actualmente el director del instituto y docente, donde transmite sus conocimientos sobre la agricultura. Como dirigente social asegura que no bajará los brazos hasta ver un campesinado feliz en su tierra, con una producción agropecuaria exitosa, así como el acceso a salud y educación de calidad.

La convicción de este luchador social lo hace brillar y por eso fue uno de los nominados a los Premios Dignidad a la Defensa de los Derechos Humanos en Paraguay, cuarta edición 2023.